El marketing digital es una de las partes más importantes de tu estrategia de comercio electrónico. Establecer, interpretar y mantener una presencia en la red es fundamental para aumentar el tráfico y potenciar las conversiones. Además, los canales de marketing online te permiten forjar relaciones más sólidas y duraderas con tus clientes ya existentes. La estrategia de las campañas digitales se basa en varias tecnologías y en un conocimiento general del mercado. Una parte integrante de este proceso es la utilización de herramientas de análisis para comprobar de dónde procede el tráfico, qué canales y campañas funcionan mejor, y cuáles fracasan. Esto, a su vez, permite a las pequeñas y medianas empresas emplear su dinero de forma más eficiente. En el ámbito del marketing online, actualmente existen tecnologías ya establecidas y otras en constante evolución que ayudan a los propietarios de negocios a entender mejor sus campañas de marketing digital, con el fin de elaborar mejores estrategias y producir contenidos más rentables. En términos generales, este campo se conoce como “analítica web”. Y dentro de este ámbito hay distintas facetas.
¿QUÉ ES LA ANALÍTICA?
La analítica es un campo muy amplio, que abarca las matemáticas, la estadística, el modelado predictivo y el aprendizaje automático, para encontrar patrones significativos en los datos. En lo que respecta al e-commerce, este término también hace referencia a las herramientas utilizadas para medir la eficacia del marketing de una empresa. Esto implica atraer tráfico a una página web y convertirlo en ventas. Todo marketing online se puede concebir como si fuera un embudo. La campaña, la que sea, es la parte ancha del embudo. Es el texto y las imágenes llamativas que consiguen que la gente haga clic en tu página web. La forma en que estas visitas interactúan con tu web es un aspecto esencial que también se incluye en el marco de la analítica. ¿Efectuaría un cliente más compras si el sitio web fuera más fácil de navegar? Tus mejores clientes gastarán más si tienen que hacer menos clics, por lo que el diseño se convierte en un aspecto muy importante para la conversión. Si se utiliza de forma correcta, la analítica web puede ayudar a:
- Atraer clientes potenciales a tu página
- Invitar al consumidor a interactuar con la web
- Fomentar conversiones de forma rápida
- Hacer que los clientes vuelvan continuamente
CÓMO UTILIZAR LA ANALÍTICA WEB PARA CREAR UNA CAMPAÑA
La creación de una campaña implica tener información sobre diversos aspectos. El primero es conocer a tu cliente. Esto conlleva el uso de palabras clave específicas, imágenes, fuentes, campañas en redes sociales, etc. El análisis de palabras clave y otra información de analítica SEO puede ayudarte de forma considerable a centrarte en dichas actividades. Esto podría incluir captar un sector o región demográfica específica. El análisis de redes sociales te ayudará a determinar el rendimiento de tus campañas, y cuáles son las que funcionan mejor. Aunque Instagram suele ser mejor para el e-commerce que Twitter, la analítica puede ayudarte a descubrir patrones que merezcan la pena probar en tu perfil de Instagram con el fin de potenciar la interacción con los clientes. También merece la pena analizar la estructura del sitio. ¿Cuántas páginas inspeccionan las visitas antes de irse? ¿Cuántas páginas o interacciones con la web realizan tus clientes antes y después de la compra de productos? ¿Vuelven los clientes a tu web? Existen herramientas para hacer un seguimiento de este tipo de información. Google Analytics es una de ellas, pero es una monstruosidad.
¿POR QUÉ LAS TIENDAS DE E-COMMERCE NECESITAN ANALÍTICA?
Las tiendas de e-commerce sobrevivirán o no según la analítica web que utilicen y cómo interpreten los datos. ¿Por qué? Hay una gran cantidad de tráfico y mucha competencia. El arte de vender (en el ciberespacio y en cualquier sitio) consiste en saber identificar y satisfacer las necesidades del cliente de forma rápida. La analítica web ayuda a hacer esto. Pero también puede mejorar el mensaje de tu marca, optimizar el contacto con tus clientes, y cerrar ventas. Saber cómo interactúan los clientes con tu web es quizás más importante que conseguir que la visiten en primer lugar. Al fin y al cabo, no tiene sentido generar tráfico si nadie va a querer comprar tus productos o utilizar tu página.
CÓMO UTILIZAR LA ANALÍTICA WEB
Hay un par de reglas para implementar campañas de marketing digital. ¿La primera y más importante? Hacer un seguimiento de todo. Esto significa que también tendrás que etiquetar todo por separado, incluso las campañas en redes sociales. Así, dividirás el tráfico por página e incluso específicamente a nivel de imagen. Si no lo haces, las distintas campañas en una misma plataforma parecerán todas tráfico vacío procedente de una sola fuente. Internet es tu escaparate global. Si sabes qué atrae a los usuarios, sabrás cómo personalizar aún más su experiencia. O mejor aún, vender lo que funciona y abandonar los productos que no lo hacen. Para ello, deberás establecer lo que se conoce como UTM, o módulos de seguimiento Urchin (el predecesor de Google Analytics). Se trata de unos códigos únicos que aparecen al final del enlace. Es muy sencillo. Lo único que necesitas es un generador de UTM, que se encuentran fácilmente y de forma gratuita en internet.
¿EN QUÉ CONSISTE UN CÓDIGO UTM?
Aunque no es necesario que lo crees tú mismo, saber en qué consiste un código UTM te ayudará a planificar tus campañas de forma más estratégica. Lo que vas a crear es una forma de API (application programming interface). Una secuencia de código que te permite establecer parámetros. A continuación, te proporcionamos una lista de los enlaces que crearía un generador de UTM.
- El enlace: la URL original de tu imagen, campaña o blog.
- La fuente: el motor de búsqueda, página web, nombre del boletín de noticias, u otro nombre de una fuente identificable.
- Medio de la campaña: se utiliza para identificar cómo se ha enviado la campaña. ¿Por correo electrónico o coste por clic?Il Nome della Campagna: è usato per identificare una promozione specifica, come “saldi invernali”;
- Nombre de la campaña: para identificar una promoción especial, como “rebajas de invierno”.
- Contenido de campaña: normalmente se utiliza en anuncios de contenidos personalizado y test A/B. Puedes usarlo para comprobar la eficacia de la colocación del contenido (por ejemplo, vía logo o enlace de texto).
- Término de campaña: A menudo utilizado en campañas de búsqueda de pago para identificar palabras clave para tu contenido.
CÓMO SE UNE TODO
En la actualidad, se utilizan tres tipos principales de analítica. Y vas a utilizarlos todos para enfocar y reenfocar tus campañas.
1: Estadística descriptiva
La forma más antigua de analizar datos. Qué ocurre y por qué. En términos de e-commerce, esto se podría ejemplificar con un usuario en Sudáfrica que hace clic en un anuncio de venta de un producto tuyo a las 12:03 hora local. Después, adquiere el producto, además de otros tres artículos. Esta información te puede resultar muy útil para entender qué es lo que se vende y qué no. Y aún mejor, lo que se vende a qué tipo de clientes.
2: Análisis predictivo
La idea de poder utilizar los datos para predecir lo que ocurre después ya te abre un mercado enorme. Además es un mercado en expansión. Una mayor capacidad informática significa que se pueden implementar más herramientas y ejecutarse de forma más barata. Un ámbito que utiliza muchísimo el análisis predictivo es Wall Street, y otras aplicaciones comerciales. Más allá de esto, se están desarrollando aplicaciones comerciales incluso para el mercado del comercio electrónico. Este tipo de herramienta ayuda a obtener información adicional sobre el comportamiento que muestra el cliente, lo que a su vez ayuda a crear campañas efectivas. ¿Un ejemplo? Si tienes un cliente que ha hecho una compra tres navidades consecutivas, es muy probable que vuelva este año.
3: Análisis prescriptivo
El nuevo vecino del barrio de la analítica. Es la parte del análisis de datos que estudia la toma de decisiones óptima. En otras palabras, si se da cierta situación, ¿cuál es el siguiente paso? En un entorno de e-commerce, podría ocurrir lo siguiente: si un cliente compra un producto por valor de €300, la tienda debería ofrecerle automáticamente un 15% de descuento en su próxima compra para incentivar su retorno. Este tipo de herramienta prescriptiva a menudo se utiliza para planificar campañas de rebajas e incentivos automatizados basándose en lo que se compra y cuándo se compra.